martes, 7 de junio de 2011

La Caída de los Gigantes, de Ken Follet

La Caida de los Gigantes es un gran libro, bajo mi punto de vista. Con la magia habitual de Ken Follet, te presenta a los personajes principales, que son los que te irán contando la historia de la I Guerra Mundial: desde cómo se fraguó, pasando por cómo se luchó hasta la rendición de Alemania y el escarnio que de ello hizo Inglaterra. Durante ese tiempo cambian los personajes, crecen, maduran, porque se ven obligados a ello. Las circunstancias de cada uno, ninguna fácil, aunque algunas mucho peores que otras, les obliga a posicionarse en los bandos que les han tocado en suerte, y así unos pierden la guerra y otros la ganan, aunque la victoria sabe a sangre y lágrimas. Los personajes son variopintos, de distintas clases sociales, y de distintas nacionalidades. Pero Follet sigue el sistema de los seis grados de separación: todos y cada uno de ellos están enlazados entre sí, como si estuvieran atrapados en una gran malla de acero.
La documentación del libro es impresionante. He de reconocer que no recuerdo muy bien las clases de historia acerca de la I Guerra Mundial, no sé por qué recuerdo mejor la segunda, pero si me hubieran dado este libro en clase, seguro que habría sacado sobresaliente. Entre las vidas de los personajes, como la vida misma, se entrelaza el marco histórico que es la guerra. Y lo cuenta todo, incluidas las fechas, pero en lugar de ser de la manera antipática de los libros de clase, lo hace de una forma bastante sutil, muy diluida con la narración, de manera que estás bebiendo datos a la par que te bebes la novela.
Porque además es adictiva. Pese a ser un tocho de libro, de unas quinientas toneladas más o menos, ha venido conmigo allá donde he ido yo. Todo el día con el libro a cuestas, con el bolso a reventar, por si tenía cinco minutos para meter las narices en el Londres de principios del siglo diecinueve, a protestar con las mujeres para pedir el sufragio femenino. (Quizás la parte que más empatía ha despertado en mi). O en Francia, luchando con uno u otro bando. O en Rusia, para ver cómo una revolución del pueblo sale adelante para convertirse después en algo peor a lo que derrocaron.
Me ha encantado la forma en que personajes que fueron reales se entremezclan con los ideados por la mente de Follet. Y qué decir de éstos últimos: unos más simpáticos, otros más odiosos, pero ninguno me ha dejado indiferente. Porque están tan bien dibujados, son tan profundos, que parecen sacados de la realidad misma.
Esta novela pertenece a una trilogía: este sobre la I Guerra Mundial, otro sobre la segunda y el tercero sobre la guerra fría. Estoy deseando que publiquen (o que escriba, aún no sé si los tiene empezados) estos libros. Tengo curiosidad por saber si rescatará a alguno de los personajes de esta primera novela, aunque no lo creo. Cada una de las historias está rematada, lo que tenían que compartir ya lo han compartido, y lo que pase a partir del momento en que nuestras vidas se separan, cuando cierras el libro terminado, ya no es de la incumbencia del lector. También tengo ganas porque me ha encantado este primer libro, y quiero recuperar la sensación de estar atrapada sin remedio en el canto de sirena de las letras de Follet.

La Caída de los Gigantes
(Trilogía The Century)
Ken Follet
Editorial Plaza y Janés
1024 páginas