domingo, 1 de abril de 2012

No logo, de Naomi Klein

No suelo leer ensayo, pero tenía este libro esperando en mi ordenador desde hace muchos años. Tenía curiosidad por leerlo porque era símbolo del movimiento antiglobalización, algo que me llamó la atención en su momento, aunque no sabía muy bien de qué se trataba (tonta de mi, el nombre lo dice todo). Aprovechando mi kindle, decidí que había llegado el momento de leerlo. Y así lo hice.
He tardado bastante en darle fin, entre otras cosas porque entre medias he leído varios libros. No es que me aburriera, porque aunque es ensayo, la narración es bastante entretenida. Pero es que me ponía de mala leche. Y tenía que parar de cuando en cuando para calmar mis ánimos.
Lo primero que llama la atención del libro es que está profusamente documentado. Hay muchísimas anotaciones a pie de página que te explican de dónde ha salido la información y un apéndice con los gráficos pertinentes.
Lo segundo que, pese a que se publicó en España en el 2002, es decir, hace ya diez años, es terriblemente actual. Como si no nos hubiéramos movido un ápice. Esto es muy triste, porque lo que muestra es una realidad gris, algo a lo que en principio nos opusimos y que luego quedó en el olvido, o relegado al final de las preocupaciones.
Las empresas, llevadas por el ansia de dinero y poder, se desmarcan de la producción con el lema: marcas sí, productos no. Es decir, una empresa cualquiera (Nike es muy nombrada en el libro) vende ideas, estilo de vida, calidad. Vende una marca. No un producto. La empresa no se mancha las manos fabricando, eso lo hacen otros por ella. Y así comienza el gran declive de la economía mundial. Y esta es una triste realidad que acontece actualmente. Desde que leí el libro, me he fijado más en lo que compro y en lo que se anuncia. Hasta la empresa para la que trabajo funciona así. Aquí solo tienen la logística y las tiendas (qué remedio, al final tienen que vender para subsistir), pero todo el material (en este caso es ropa) viene de proveedores que están, en su gran mayoría, en la India, aunque también tienen en China y en otros lugares de Asia. Se lavan las manos con una política de empresa que no permite trabajo infantil y que apoya a ONGs para luchar contra esa lacra. Pero sí que permite, con su forma de actuar, que el gobierno de esos países permitan el trabajo esclavo en sus fábricas. Si cada una de las multinacionales se plantara y no diera trabajo a paises que permiten esas condiciones laborales, el trabajo esclavo se acabaría. Pero, claro, ni a las empresas ni a los gobiernos les interesa hacer algo al respecto. Prefieren mirar para otro lado y lavar sus pecados en ONGs, para que el mundo vea lo buenos que son.
Y mientras tanto, esas condiciones laborales se extienden al resto del mundo. Nos las meten como reformas necesarias a causa de una crisis económica mundial (efecto directo de la globalización, claro), que les ha venido muy bien a algunos sectores. Porque mientras haya pobres, podrá seguir habiendo ricos.
Creo que es un libro necesario para entender cómo funcionan algunas cosas en el sector mercantil. A mi, desde luego, me ha abierto mucho los ojos. Y, como ya he dicho antes, tiene una lectura sencilla, no se hace aburrido ni pedante. Aunque creo que deben abstenerse los que tengan tendencia a exaltarse, pues en algunos momentos te hace hervir la sangre.


No logo
El poder de las marcas
Naomi Klein
Editorial Paidós
559 páginas


7 comentarios:

  1. Un libro que parece denso el que nos presentas. No sé yo si me animaré con este... Precisamente lo que necesito son libros ligeritos que me saquen un poco de la rutina. ¡Otra vez será!
    ¡Muchos besos!

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  2. Pues me parece que me voy a ahorrar esta lectura, que no estoy para ponerme de mala leche. Menuda mierda de capitalismo, globalización y crisis económica. Qué asco da todo a veces.

    Me alegro de que te haya resultado una lectura productiva.

    ¡Besines!

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  3. MARÍA: No es que sea muy denso. Bueno, un poco sí, no te voy a engañar. Pero es interesante. Aunque cuando no estamos para ciertas lecturas es mejor dejarlo, además es un poco tocho. Gracias por pasarte. Besos!!

    LADY: Te pondrías de mala leche, al descubrir algunos tejemanejes que aún hoy (pese a que el libro se escribió hace una década) no sólo se siguen practicando, sino que han empeorado. Y comprendes de dónde viene (en parte) esta mierda de crisis global. Y luego nos dan caramelitos para que no veamos ciertas cosas... Lo dicho, que mejor ya te lo cuento yo... Besos!!

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  4. Yo no soy muy de ensayos pero este parece interesante y el tema que toca más de actualidad imposible, podría caer. Bsos

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  5. CAROL: La verdad, yo tampoco es que sea de ensayos, pero precisamente por lo actual del tema (y eso que, como digo, está escrito hace una década)es más que interesante. Un tochazo, pero merece la pena. Si te decides ya nos cuentas. Besos!!

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  6. Trescatorce:
    Me convenciste, será mi próxima lectura. El conocimiento libera. ¡Gracias!
    Leamos a los niños.
    -- Una mami.

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    Respuestas
    1. Hola MAMI ANÓNIMA! Me alegro mucho de haberte convencido, estoy completamente de acuerdo con que el conocimiento libera. Y sí, hay que leer a los niños, pero no empieces por este libro o aborrecerá la lectura!!
      Muchas gracias por tu comentario. Saludos!!

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