Hace poco, y gracias al dinero que recibí por mi cumpleaños (previamente había dejado claro que quería precisamente dinero y no otra cosa), me he comprado un lector digital. Es un Kindle, de Amazon, y lo pedí por internet. En apenas dos días lo tuve en casa.
Pero hasta llegar a ese momento en el que, sentada frente al ordenador, le di a la tecla de “enviar” con la misma ilusión de una niña pequeña cuando recibe un juguete, pasé por muchas fases. Y una de ellas (la primera), fue la de rechazo hacia los libros electrónicos. (Cosa que mi marido aún me echa en cara cuando me ve leyendo en el kindle).
Y es que en mi siempre ha existido una dicotomía un tanto extraña, entre la lectora voraz que soy, amante de los libros, de su textura y de su olor, y la loca de la tecnología que llevo dentro. Me encanta todo lo electrónico. Desde bien chiquitita ya me llamaban esos cacharros: un radio casette, un walkman, una consola de videojuegos de cartuchos… A los 15 tuve mi primer ordenador, compartido con mis hermanas, que nos cargamos varias veces a fuerza de tocar y deshacer lo tocado. Cuando salieron los móviles fue ya la locura: de pasar a uno naranja con el que solo podía llamar y mandar mensajes a que la posibilidad de poder llamar sea lo de menos mientras tenga reproductor de música, cámara de fotos y acceso a internet. Entre medias, la nintendo ds, a pesar que casi no juego, un ordenador de mesa y otro portátil, y un ipod. Me encanta lo tecnológico, pero tampoco me vuelvo loca, y dado que una no es rica, pues me voy comprando lo que puedo, sin excederme en pasta.
Pero cuando salieron los libros electrónicos me negué a comprarme uno. Eso de leer en la pantalla no me iba, ya lo había probado con la nintendo, y no era muy cómodo. Es que los libros deben ser en papel. Es que la pantalla te hace daño a los ojos… Todo eran excusas, de una parte de mi cerebro, mientras la otra babeaba como Homer cuando ve una rosquilla. Luego me informé bien. Pantalla de papel electrónico, sin retroiluminación. Nada de daño en los ojos, es como leer una hoja de papel. Tinta electrónica, que cuando se coloca ya no gasta energía. Capacidades varias, dependiendo del modelo. Y un catálogo de libros inmenso a tu disposición. Y cuando mi hermana se compró el suyo, y me lo enseñó y pude probar lo que era un libro electrónico en realidad, ganó mi parte tecnológica de una vez por todas.
Después de un exhaustivo exámen de los dispositivos del mercado, me decanté por el de Amazon, gracias a su calidad-precio. El Kindle es un e-libro barato y con unas prestaciones muy buenas. Es pequeño, pero no escaso de pantalla. Ligero, y con capacidad de 3 gigas. Sin posibilidad de meterle tarjeta de memoria, pero creo que tiene capacidad de sobra. Llevo más de cien libros en él y todavía no he llenado ni un giga. Reproduce mp3 (aunque para eso tengo el ipod) y tiene conexión wifi. También trae 3g gratuito, pero todavía está en pruebas y no funciona muy bien.
Ya he leído tres libros en él, y me estoy leyendo el cuarto. Y he de decir que es comodísimo. Pensé que iba a ser una lectura más artificial, como cuando lees en la pantalla del ordenador, que está bien para cosas cortas, pero que no te vale para una novela (por lo menos para mi). Sin embargo, es como leer la página de un libro, con la ventaja de que no hago ruido al pasar de hoja. Esto me viene muy bien para no despertar a mi peque y continuar con mi vicio de leer en la cama.
Me esperan muchas lecturas más con mi kindle, aunque eso no significa que deje de leer, o de comprar, libros en papel. Pero con el e-libro ahorro mucho espacio, y me haré más selectiva con las compras en papel.
Yo también me quiero comprar unooooo
ResponderEliminarPero aún no me he decidido por cuál.
Me alegro de que te guste, ya sabes que el Kindle me parece una maravilla, y pasé una fase de envidia cochina muy mala (que me duró hasta que abrí mi iliad con sus 8 pulgaditas y me puse a leer El tiempo entre costuras).
ResponderEliminarLos elibros (me ha gustado) vienen genial para el tema espacio. Y para tener en papel única y exclusivamente lo que te interesa.
Acumular por acumular, sin ser rico y sin tener espacio ilimitado, lo veo chungo. Así que entre elibros, compras, préstamos y bibliotecas... tenemos todo cubierto!
¡Un besazo!
PD. Acabo de ver el mensajito del cajón de comentarios... qué te iba a decir yo... ¡petarda!
Por cierto! Te has olvidado del disco duro multimedia... :P
ResponderEliminarjejej yo estoy en la fase de ver cual me compro, ahora hay algunos muy baratos, pero chica tengo miedo de meter la pata con algo que no es precisamente barato...
ResponderEliminarISI: Creo que al final todos los lectores compulsivos acabaremos comprando uno, por tema de espacio sobre todo. Ya nos contarás por cuál te decides...
ResponderEliminarLADY: Si es que no se puede ser tan envidiosa, sobre todo cuando tú tienes uno muy chulo! Ahora lo terrible es mi lista de lectura, ha aumentado en proporciones gigantescas...
Ahh, y no me acuerdo del comentario en cuestión, peeeroooo... ¡¡Petarda tú!!
CARMINA: Al final lo importante son dos cosas (bajo mi punto de vista): la duración de la batería y el tiempo que tarda en pasar de página. Yo he tenido el Papyre en las manos, y es genial, pero bastante más lento que el mío en pasar la hoja, lo cual me ponía un poco nerviosa... Lo demás son extras para destacar los unos de los otros. Te digo lo mismo que a Isi, cuando te hayas decidido ya nos contarás qué tal...
Besos para todas y gracias por comentar!!
A mi me regalaron uno mis padres y la verdad es que lo uso poquísimo al pobre, es verdad que es muy ligero, que la lectura es cómoda, pero yo que sé, es que el papel me sigue gustando infinítamente más: puedes ver físicamente cuántas páginas te quedan para acabar un capítulo por ejemplo, cosa que con el ebook no. En fin, para cosas que antes leía con esfuerzo en el ordenador, libros que no compraría o que no encuentro en la biblio está bien, pero me sigo tirando sin remedio al papel, quizá acabe acostumbrándome con el tiempo. Bsos
ResponderEliminarCAROL: Yo de momento voy compaginando... Uno en papel, dos o tres en e-libro... Por la novedad, ya sabes. Estoy de acuerdo en lo de mirar cuántas páginas te quedan del capítulo, es una cosa que echo de menos. Pero, aunque me encanta mi juguetito, reconozco que donde esté el papel está el encanto...
ResponderEliminarBesos!!
Ya sabes que estoy deseando tener un eReader, y que cada vez tengo más claro que será el Kindle. No sé si cuando lo tenga le daré mucho uso, pero estoy convencido de que finalmente será casi indispensable, sobre todo porque tengo muchísimos clásicos y libros en inglés en el ordenador. Esta entrada me deja las cosas un poco más claras. ¡Sólo dos días tardó en llegarte! Increíble.
ResponderEliminarPor cierto, ¿la funda la compraste también en Amazon? Me encanta el diseño que tiene. Y otra cuestión: eBooks como "El tiempo entre costuras" o "Cuernos", ¿dónde los has encontrado? Para finalizar, ¿la conversión con Callibre es correcta, no se descuadra nada?
¡Perdona este pequeño interrogatorio!
Seguramente espere hasta principios de diciembre para comprarlo, por si anuncian algún modelo nuevo.
¡Un beso!
JESÚS: Yo desde luego estoy encantada con el kindle, es ligero y pasa las páginas muy rápido. Estoy segura que cuando te lo compres le darás más uso del que ahora imaginas. La funda la compré en e-bay, porque las de amazon son excesivamente caras (bastante que conseguí el dinero para el e-reader).
ResponderEliminarLos libros algunos me los ha pasado mi hermana y otros amigos, aunque hay varias páginas interesantes, por privado si quieres (en twitter mismo) te digo cuáles.
Y hay algunos que al convertirlos se descuadran y otros no. Al principio me dio la neura de convertirlos todos con el conversor de amazon (una dirección mail que te lo envia a tu correo y al kindle via wi-fi), pero te recomiendo que si están en txt o mobi no lo hagas, porque es cuando se descuadra. Los pdfs quedan mejor con el calibre que con amazon.
Y estás perdonadísimo por el interrogatorio. Cualquier duda que tengas me la puedes consultar por twitter (ahora que me estoy volviendo adicta).
Besos!!
¡Mil gracias por tu respuesta! Supongo que seguiré pensando hasta diciembre, porque supongo que me lo compraré para navidades. De momento, lo único que me frenaba a comprar el Kindle en lugar de un lector vendido aquí era lo de los formatos, las conversiones y los descuadres.
ResponderEliminar¡Muchos besos!