lunes, 23 de septiembre de 2013

La Tierra de las Cuevas Pintadas, de Jean M. Auel

Sinopsis (contraportada): Hace ya muchos años que Ayla, la niña cromañón y protagonista de la serie LOS HIJOS DE LA TIERRA, fue expulsada del Clan del Oso Cavernario, y que inició su largo viaje por todo el continente europeo. En La tierra de las cuevas pintadas se ha establecido en la Novena Caverna de los zelandonii, lugar de donde procede su compañero Jondalar, con quien ha tenido una hija muy deseada, llamada Jonayla. Ayla hace todo lo posible por encontrar el equilibrio entre sus nuevas obligaciones como madre y su preparación para convertirse en líder espiritual y en curandera,pero no siempre lo consigue.



En esta última entrega de Los Hijos de la Tierra, nos encontramos de nuevo con Ayla, la mujer a la que, por lo visto, le debemos toda nuestra evolución. En el comienzo del libro nos encontramos con una Ayla que lleva un año asentada en la Novena Caverna Zelandoni, junto con su amor Jondalar y la hija de ambos, Jonayla. Ha aceptado ser acólita de la Primera Entre quien Sirve a la Madre, y compagina todos sus quehaceres con el aprendizaje de la zelandonia.
Escogí este libro para mi reto Desafía tu estantería porque estaba deseando leer esta última entrega de las aventuras de Ayla, ya que los anteriores libros me gustaron. Recuerdo El Clan del Oso Cavernario muy interesante, y algunos de los restantes también. Quizás el que recuerdo más aburrido es en el que tiene que vivir en el valle sóla, porque hasta que encuentra a Jondalar se hace un tanto aburrido y repetitivo. Y el siguiente casi lo calificaría de porno, porque la autora se esmera en describir cada encuentro sexual con pelos y señales, y no tienen precisamente pocos.
Pero este último no me ha gustado. No voy a decir que nada, porque sino no me lo hubiera terminado, pero casi nada.
Empecemos por lo que me ha gustado. La descripción de la vida de una sociedad cazadora-recolectora, que vive en las cavernas es muy interesante. Se esmera en describir la vida por aquel entonces, cómo fabricaban sus utensilios, cómo establecían sus relaciones sociales, tan necesarias para la supervivencia del grupo. También hace una descripción de la religión prehistórica muy interesante. Todo ello inventado, por supuesto.
Lo que no me ha gustado: todo lo demás. 


Es un libro de más de mil páginas, y le sobran como la mitad. O más. Es una repetición constante de lo mismo. Cada vez que alguien nuevo se encontraba con Ayla y sus animales se explicaba que no estaban acostumbrados a ellos. Una y otra vez lo mismo. Al igual que cuenta varias veces y casi de la misma forma episodios del pasado de Ayla. Que sí, ha vivido mucho, pues podría contar cosas distintas, ¿no? Pues no. Es repetitivo hasta la saciedad, casi como si la autora no supiera muy bien por dónde tirar y tuviera que darle vueltas a lo mismo para encontrar el camino. El caso es que no lo encuentra.

Tampoco la narración es buena. Debido a mi mala memoria (antológica), no recuerdo los detalles de las anteriores entregas, de modo que no sé si es algo nuevo en este último libro o ya era así antes. Pero no consigue empatizar con ningún personaje, porque no narra desde el punto de vista de ellos, sino que se limita a describir sus acciones y sus sentimientos. Es como si alguien te cuenta una película según va pasando. Como los documentales malos que, mientras el narrador explica los datos, se ilustra con actores que van representando lo que cuenta la voz en off. No sé si consigo explicarme. En el curso de escritura que estoy haciendo, en el primer fascículo se explica la diferencia entre mostrar y contar. Y cómo, en un texto literario, es necesario combinar ambos para una mayor fluidez. Śe cuenta lo más innecesario. Se muestra lo más importante para la trama. Pues aquí tenemos mil y pico páginas donde nos cuentan todo. Es pesado y, además, infructuoso, por mucho que se esfuerza la autora en contarnos los sentimientos y motivaciones de los personajes no conectamos con ellos.
Es una novela muy bien documentada. Eso se nota. Ese es el problema, que se nota demasiado. Como parte de su preparación, Ayla tiene que visitar las cuevas sagradas de la zona. Y ahí tenemos otra cuarta parte del libro: descripciones, a secas, de las pinturas de las cuevas. En algún momento llegan a especular acerca de su procedencia y significado, pero se moja poco y no aclaran nada. Y para eso, para puras descripciones de pinturas rupestres (que por otro lado, muy bien descritas, han despertado mi memoria dormida del arte de COU), podía haber puesto fotos y la señora se habría ahorrado unas 300 páginas.


Y, por no extenderme mucho más, el último punto que quiero destacar es la poco originalidad del argumento. Da vueltas y vueltas y vueltas a otras cosas, para ponerle un broche que, oh, sorpresa, ya había utilizado en otra entrega de Los Hijos de la Tierra. Es calcado. Pero ya no radica ahí el problema. Lo que yo veo que falla es que los personajes no actúan coherentemente. No me creo ni por un segundo la forma de actúar, ni de Jondalar ni de Ayla. No tiene un precedente que lo justifique y, por más que intente explicarlo, a veces incluso de boca de los mismos personajes, no es creíble.
Conclusión, me parece un libro más de relleno que otra cosa. Totalmente innecesario para la serie, que ha sido escrito quizás pensando más en las ventas que en lo que quería contar. Y lo que más miedo me da es que hay un par de cosas al final que parecen una puerta abierta a otra entrega. Y si es así, si hay otra entrega más de Los Hijos de la Tierra, aquí no tienen una lectora. Se me han quitado las ganas.

6 comentarios:

  1. Sólo he leído el primero, que me gustó mucho. Pero no me he animado con el resto de libros. Y la verdad es que no creo que los lea. Me apetece quedarme con el buen recuerdo del primer libro.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
  2. Pues ahora no sé si leerme esta saga o no, porque para que el último libro sea una patata... ¿Los otros se pueden leer de manera independiente?

    ¡Besines!

    ResponderEliminar
  3. Será una saga popularísima y todo lo que queráis, pero a nosotras nos da una pereza que no podemos con ella.

    ResponderEliminar
  4. Todavía no me he animado con esta saga... y eso que me han recomendado sobretodo los dos primeros...

    Besotes

    ResponderEliminar
  5. Jolín, menudo bajón! :(
    Es una de mis sagas favoritas, a pesar de que tiene sus más y sus menos, pero tenía esperanzas en este "nuevo" libro. Lo tengo en edición rústica desde que salió pero todavía no lo había empezado, no sé por qué...
    Lo leeré igualmente, pero bueno, avisada quedo de lo que me puedo esperar.

    ResponderEliminar
  6. MARGARI: Si te apeteciera podrías leer hasta el tercero, que es hasta donde más se disfruta. Este último desde luego ha sido más de relleno que de otra cosa. ¡Besotes!
    LADY: No se puede leer de manera independiente porque en cada libro la protagonista consigue unos avances que incorpora a su vida. Lee el primero, que es el mejor, y los demás hasta donde te apetezca. El último te lo puedes ahorrar, ya te lo digo. ¡Besotes!
    AL RICO LIBRO: Lo popular no siempre es lo mejor. A mi me gustaron mucho los primeros libros, sobre todo porque narra como sería la vida en la prehistoria, algo que me llama poderosamente la atención. Pero si no os interesa el tema tampoco es que os perdáis mucho (sobre todo con éste último). ¡Besotes!
    SHORBY: Bueno, hay un momento para todo. Si algún día te apetece cuéntame qué tal. ¡Besotes!
    ISI: Siento ser yo quien te haya dado la noticia... Oye, a lo mejor es que estoy gruñona y lo veo todo mal, pero vamos, que me ha parecido una tomadura de pelo eso ya te lo digo. Cuando te lo leas lo comentamos. ¡Besotes!

    ResponderEliminar

Te invito a comentar, pero siempre desde el RESPETO. Me guardo el derecho a borrar cualquier comentario que considere que falta al respeto de cualquier manera. ¡GRACIAS!