Lo descubrí hace un par de años, por casualidad. Vi el nombre en las redes y me llamó la atención: NANOWRIMO. ¿Nanoqué? Pensé. NANOWRIMO: lo leí como una niña pequeña, juntando las letras: la n con la a naaaa, la n con la o noooo y así: NA-NO-WRI-MO. Luego investigué un poco más y me fascinó la idea.
El nombre es un acrónimo: NAtional NOvel WRIting MOnth: el mes nacional de la escritura de novela. La iniciativa nació en Estados Unidos (dónde si no...), hace unos dieciséis años, para dar prioridad a la creatividad, pero no es exclusivo de ese país. Puedes participar vivas donde vivas.
La idea es bien sencilla (al menos aparentemente): consiste en escribir una novela en un mes. El mínimo de palabras que tienes que escribir son 50.000, que es el mínimo exigible para una novela corta (unas 175 páginas, he leído por ahí). Y ahí te apañas tú, te planificas como veas y vas subiendo la cantidad de palabras a la web. Y el 30 de noviembre validas tu novela, para ver si has superado la cantidad. Si es así, enhorabuena, has ganado Nanowrimo.
La idea es escribir sin pararse a comprobar si está bien o está mal, si es material del bueno o es pura bazofia. Escribir como si no hubiera un mañana, para llegar al 30 de noviembre con 50000 palabras en una novela. De mierda, una novela de mierda, vale, pero ya tienes una base que editar más tarde. Y quién sabe, lo mismo de ese germen medio pocho sale un súper ventas.
Lo que me parece más divertido del asunto es que no lo haces solo. Escribir es una tarea muy solitaria, y además bastante incomprendida. Entre mis conocidos veo caras raras cuando digo que escribo, y eso que no se lo digo a todo el mundo. Pero en Nanowrimo hay foros, hay herramientas de ayuda y hay quedadas por regiones para hacerte sentir en compañía.
En Madrid quedarán esta noche, sobre las once, para cuando el reloj marque la media noche ponerse cada uno a escribir. A mi me parece una manera muy divertida de celebrar Halloween.
Hace dos años, cuando lo descubrí, me apunté, y fue un fracaso total. ¿Y por qué no me apunto otra vez, si me parece tan divertido e interesante? Pues porque sé que no voy a poder conseguirlo. O mejor, sé que si lo consigo será a costa de dejar atrás otro tipo de cosas, como el blog o mi proyecto. Que, por cierto, casi llevo las cincuenta mil palabras que piden en Nanowrimo, pero desde enero, es decir... ¡en diez meses!
No lo descarto para más adelante, pero ahora sé que no es mi momento. Sin embargo animo a cualquiera que sienta el cosquilleo de las palabras en las puntas de los dedos a que participe, porque no hay nada que perder y sí mucho que ganar. Podeis visitar la página aquí.
Y aprovecho para desearos un feliz Halloween. Yo veré una vez más la peli que luego veo también por Navidad, una de mis favoritas. Y para muestra, un botón:
No me aparece el botón ni la muestra jeje. No conocía esta iniciativa pero no me termina de convencer. Odio escribir con presiones o plazos. Cuando me apetece me pongo y punto sin pensar en la extensión o el número de palabras. Muchos besos y feliz Halloween.
ResponderEliminar¿No te aparece el vídeo? Es el de la canción Esto es Halloween de Pesadilla antes de Navidad... Jopetas...
EliminarBueno, a mi no me va mal poníendome objetivos mensuales, lo que pasa es que no lo tomo como una presión. Y lo del Nano pues tampoco, si ganas te dan un diplomilla, pero que tampoco pasa nada si no escribes las cincuenta mil.
Pero te entiendo perfectamente, a mi antes también me agobiaban los plazos y los objetivos. Ahora lo de los objetivos lo he superado, pero lo de los plazos aún no. Todo se andará.
¡Besotes!
No creo que escribir con presión, como dice Goizeder, sea bueno. Y con un mínimo de palabras...
ResponderEliminarMe encanta la peli! Me has dado idea para este finde!
Besotes!!!
Bueno, MARGARI, creo que es más bien una presión light, eres tú quien se encarga de presionarte.A mi los objetivos me ayudan a planificarme y a no procrastinar, que eso sí que se me da fenomenal...
EliminarEspero que hayas disfrutado la película, ¡es genial!
¡Besotes!